Rrrrr, Rrrrrr, Rrrrrrr

jueves, 14 de octubre de 2010

Alegría para empezar la morning

De hoy en adelante seré millonaria. Y no porque lo haya decidido yo, que yo tomo decisiones que por mucho que vayan dirigidas a ese objetivo, jamás se me cumplen. Pero es que hoy, tal y como he abierto la puerta del garito este donde trabajo, lo primerito que me he encontrado (encontrar no es la palabra apropiada) ha sido con una mierda tamaño caballo que, por supuesto, me he llevado por delante. De refilón, afortunadamente.

Y como dicen que a quien pisa una le va a tocar la lotería (no compro nunca), pues de ahí mi cavilación que hago extensiva para que sepáis que ya mismito tendréis una amiga rica donde las haya. Y sin buscarlo, que es lo más gracioso. Oloroso de narices sí es, pero gracioso no.

La de veces que yo habré dicho que aquí tendríamos que tener un plus de peligrosidad. Y no se me ha hecho caso en ninguna de las ocasiones. Pues si pisar una mierda a las ocho menos algo de la mañana, cuando aún no se ve un pijo, no tiene peligro, que venga dios y lo vea. O que la pise él…

Le he puesto a esta entrada la etiqueta de "en mis propias carnes", aunque más bien tenía que haberle creado otra: "en mis propias botas". Qué ascooooooo

No hay comentarios:

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails